Creo que una de las bondades más trascendentes de un autor literato es que su obra permanece viva a través del tiempo, para admirarla, conservarla, preservarla o heredarla. Así es la literatura, una obra plasmada en un libro que se hereda a través de generaciones.
Abril es un mes importante para la literatura: el 2 de abril es el Día Internacional del Libro Infantil y el 23 de abril es el Día Mundial del Libro. Los niños son el semillero de la literatura y los padres somos los responsables de que florezca el hábito de la misma, por esto, me he dedicado a leer más cuentos clásicos a mis hijas y he disminuido más el consumo de la TV en casa.
Como la 5ª hija de 11, a pesar de la multitud en que vivíamos en casa, cierro los ojos y recuerdo a mi papá leyéndome todas las noches. Tenía una colección de cuentos clásicos que me hicieron enamorarme de algunas historias. También recuerdo haber tenido esos libro/casetes que narran al mismo tiempo que lees.
La lectura es un compromiso cultural que cada familia debe asumir como un hábito. La lectura es la llave que abre la mente de cada persona, según lo que lea, el tema y el autor, será esa la semilla que germinará en cada idea, dirección, convicción e ideal, o incluso en la filosofía de vida que la persona adquiera.
Una familia debe adquirir el compromiso de la lectura desde la edad más temprana, para compartir y heredar el gusto por la misma de formas muy sencillas:
- Con el simple hecho de tener libros al alcance de los niños para que los abran, hojeen, toquen o incluso huelan; así se fomenta el interés incluso sin saber cómo leer.
- Leer cuentos y recitar poemas llena la mente de imaginación, memorias y creatividad, así como la música.
- Leer nunca debe ser una actividad asociada a un castigo, leer debe ser un momento placentero, libre y voluntario.
- Visitar las bibliotecas o librerías siempre será una experiencia, más ahora entre tanta tecnología el olor a libro cada vez es más exótico y único.
- Seleccionar un libro para cada edad determinará el nivel de atención para cada lector, cada edad y etapa tiene distintos intereses y alcances, algunas son más visuales que otras.
- Leer debe ser considerado un hábito diario, no esporádico. Leer debe llegar a producir un sentimiento de necesidad por la misma.
- Leer alimenta la mente y el vocabulario, no sigamos la ortografía; la lectura puede convertirse en la redentora de nuestras generaciones.
- Cada quien tiene un gusto diferente por los temas de lectura; respetar es lo más apropiado para no desalentar el gusto por la misma.
- Hay que encontrar un rincón en casa dedicado a la lectura, armar una biblioteca casera y mejor aún empezando por los clásicos.
- Un libro es parte del patrimonio de un hogar, un libro siempre es el mejor regalo para dar, un libro siempre es más una inversión que un gasto adquirido.
Que nunca se nos olvide que un país adquiere valor a través de su gente, que se enriquece de cultura, que trasciende a través de la historia. Leer alimenta el alma, y corazón, fomenta la búsqueda de la verdad y libera la mente de la ignorancia. Un pueblo que lee es un pueblo en la búsqueda de la verdad, del progreso y de su liberación.
Si tienes libros que ya no lees, dónalos o regálalos. Un libro es una cadena de favores colaborativa, hoy leo yo y mañana lo lees tú.
https://www.youtube.com/watch?v=VljJIQuPDSE